martes, 7 de mayo de 2013

Javierada2013: "Allí me verán"


“Allí me verán”. Con ese lema en la cabeza empecé mi javierada, mi peregrinación, con la intención de cumplirlo, ver a Cristo, en un encuentro de verdad. En muchas ocasiones me he preguntado si hoy día, en la sociedad tan moralmente empobrecida en la que crecemos, se puede ser cristiano de un modo razonable: en Javier he descubierto que sí se puede.

Javierada2013: las fuerzas de Dios


Dios nos ama, quiere entregarse a todos, que le conozcan. Esta javierada me ha servido para ver que el camino que Dios quiere para nosotros es sencillo, solo necesita que estemos atentos, con la mirada limpia, para ver a los demás como verdaderos hermanos y poder ser instrumento, haciéndoles llegar su amor.

Dejarnos llevar, decir que sí, o incluso equivocarnos, siempre tiene un sentido, siempre sirve para algo. Ningún sufrimiento es en vano si lo dejamos en manos de Dios, para que le ayude a llegar a todos.

Este camino, aunque tiene baches, es siempre alegre a Su lado. Lo único que necesitamos es confianza. ¿Qué cómo se consigue la confianza en Dios? Fácil:  venciendo las tentaciones cada día, abandonando nuestros esfuerzos de superarlas sólos y ofreciéndolas a Cristo, sabiendo que sólo Él puede darnos la fuerza para vencer todas nuestras dudas. No es una negación de uno mismo, sino el encuentro de la plenitud personal basado en la certeza que tenemos de su amor. Un amor que no es humano, que no nos juzga, sino que es misericordioso y no nos deja solos ni un instante.